jueves, 1 de marzo de 2012

Lavanda


La Lavanda o espliego (lavanda
angustofolia) es un arbusto de tallos leñosos, ramas de espigas
alargadas y flores de color morado que desprenden un aroma intenso y
fresco. Dentro de sus componentes destacan principalmente el lanilol,
que tiene propiedades energizantes y los taninos, que son útiles
como antisépticos, cicatrizantes, antioxidantes y protectores de la
piel. Esta planta es originaria de los países mediterráneos
de Europa y norte de África y desde siempre se ha utilizado la
esencia de sus flores para la fabricación de lociones y perfumes. Desde tiempos remotos que la Lavanda se usa para perfumarse, se dice que los Romanos la utilizaban en sus baños y
también acostumbraban a llevar un ramito entre las ropas para
ahuyentar a los insectos. Buen dato para los alérgicos a las picadas
de mosquitos. La planta florece en verano y la recolección
de las flores para uso medicinal se lleva a cabo entre los meses de
julio y agosto. Las flores se cosechan a mano una vez que estén
abiertas, idealmente en un día soleado y bien entrada la mañana.
Como contiene componentes alcohólicos (linalol, geraniol y borneol)
se debe secar a la somb ra y a una temperatura inferior a los 35 ºC.
A mayor temperatura se evaporan los alcoholes, se altera la esencia y
se pierde la actividad terapéutica de la planta. Propiedades
e indicaciones: El componente principal de la Lavanda es el aceite
esencial, que contiene alcoholes terpénicos (linalol, geraniol y
borneol) y sus esteres, entre otras muchas sustancias, responsables
de sus propiedades sedantes del sistema nervioso central,
hipotensoras, antiinfecciosas y bactericidas.La Lavanda es un
remedio eficaz para calmar los nervios y en caso de ansiedad,
irritabilidad, insomnio, taquicardia y migrañas. Es también
excelente como tónico digestivo ya que ayuda a expulsar los
gases.Por su acción calmante, antiséptica y cicatrizante,
en uso tópico se aplica en baños y compresas para tratar dolores
reumáticos, infecciones cutáneas, heridas, picaduras de insectos,
etc. Precauciones: Se aconseja no aplicar aceites esenciales
de Lavanda por vía interna durante el embarazo, la lactancia, a
niños menores de seis años ni a quienes sufren trastornos
gastrointestinales de diversa índole (gastritis, úlceras, colon
irritable, colitis, etc.) o padecen epilepsia, Parkinson u otras
enfermedades neurológicas. El aceite esencial puede provocar
dermatitis de contacto a personas sensibles y en dosis elevadas es
neurotóxico. Plantas con las que combina: Se puede preparar
una infusión de lavanda mezclada con otras plantas tranquilizantes
como tila, amapola, melisa, pasiflora e hipérico. Puesto que se usa
como remedio para tratar las migrañas combinada con la verbena,
suaviza el fuerte sabor de ésta. Si el fin es mejorar las
digestiones se puede tomar combinada con manzanilla, poleo, menta,
regaliz y anís.Formas de presentación: Por destilación al
vapor de las Flores de Lavanda se obtiene el aceite esencial de un
color que va desde el amarillo oscuro al amarillo verdoso, muy
empleado en perfumería. El aceite de Lavanda es útil para
mitigar las molestias de las picaduras de los insectos, sin embargo,
su uso más conocido lo encontramos en el campo de la cosmética y
aromaterapia. Se utiliza en los vaporizadores ambientales, en baños,
aguas florales, colonias, perfumes, lociones, jabones y champúes,
entre otros.La infusión de Lavanda es un remedio eficaz para
calmar los nervios. Para ello, se hierve agua, se añade un puñado
de flores y se deja en reposo unos minutos. Se recomienda tomar dos
tazas diarias después de las comidas. El alcohol de Lavanda
es muy adecuado para dar fricciones y calmar tensiones musculares,
así como para activar la circulación y aliviar el cansancio si se
añaden unas gotas a un baño caliente. Se puede elaborar alcohol de
Lavanda de una manera sencilla: añadir a un litro de alcohol de 90º
unos 30 gramos de esencia de lavanda, dejar macerar durante dos días,
filtrar y conservar el producto en un recipiente hermético y en
lugar oscuro.Las flores secas perfuman la ropa y ahuyentan a
las polillas, por lo que se pueden colocar pequeñas bolsitas con
flores en armarios, cajones o dentro de los bolsillos de la ropa tal
cual lo hacían los Romanos siglos atrás.Las Flores de
Lavanda se utilizan en la preparación de alimentos o exquisiteces
tales como helados, miel, mermeladas y chocolates. Baño con
Flores de Lavanda Aquí va un consejo para darse un baño con
Flores de Lavanda.Ingredientes:1 taza de flores secas de
lavanda.2 tazas de avena.½ taza de bicarbonato. Mezcla
los tres ingredientes y muélelos hasta que se forme una harina
integral y rocía media taza de la preparación en la tina. Además
de reanimar la epidermis seca o sensible, tiene propiedades curativas
para quemaduras de sol o picaduras de insecto.

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